Sábado 6 de diciembre: Tocamos diana muy temprano. A las 5:15 suena el despertador puesto que hay que prepararse, desayunar fuerte y desplazarnos hasta nuestro punto de partida. La salida esta prevista a las 7:15 desde la marquesina situada al final del puente de La Barca (Poio). Tras llegar a nuestro punto de partida y saludar a algunos acompañantes nos disponemos a subirnos al transporte que nos acompañará durante los próximos tres días. Hace bastante frío, yo calculo que sobre unos 6ºC aproximadamente.
Partimos rumbo a nuestro primer destino, el Museo-Mina de carbón de Arnao (Asturias). Para ello nos encaminamos rumbo al parque de bomberos de Pontevedra para coger el enlace de la AP-9 dirección A Coruña.
Tras llegar a la ciudad de Santiago de Compostela nos salimos de la AP-9 para tomar la N-634 y seguir camino Curtis y Teixeiro.
Aproximadamente sobre las 10 de la mañana es hora de hacer una primera parada que acordamos efectuar en un area de servicio de la localidad de Guitiriz, para estirar un poco las piernas, ir al baño y los que quisimos tomarnos un cafecito. La temperatura ambiental aquí sí que es muy fría (3ºC) y se siente bastante humedad en relación a cuando partimos.
Tras 40 minutos de "tregua" proseguimos nuestro viaje. La A-8 ya es una realidad en nuestro camino y después de superar Villalba, Mondoñedo y Ribadeo, Asturias nos recibe con un cielo encapotado tras pasar el puente sobre el río Eo. Vamos dejando atrás los carteles de localidades tan bonitas como Navia y Luarca que conozco de otras ocasiones.
Son las 11:45 de la mañana y llegamos a la localidad de Piedras Blancas, donde tomamos un desvío que nos llevará a la playa de Arnao (nuestro primer destino).
El oleaje con el que se nos presenta la playa de Arnao es digno de dejar guardado en varias instantáneas de nuestras cámaras, tanto de vídeo como de fotografía. Tras una visita guiada por el Museo-Mina nos disponemos a bajar a 60 metros de profundidad en dos turnos. A mi me toca bajar en el segundo turno, no por capricho, sino porque así lo decidimos previamente.
Después de darnos unas explicaciones sobre la historia de la mina, es hora de caminar sobre sus oscuras galerías con un par de candiles para la ocasión. Me quedo impresionando con las condiciones de trabajo que tenían los que antaño caminaban por éstas galerías sin los medios de hoy en día.
Más información del Museo-Mina de Arnao aquí: www.museominadearnao.es
Sobre las 13:45 tomo mi última fotografía de la playa de Arnao lo que indica que sobre esa hora es la que partimos hacia nuestro "cuartel general" situado en la ciudad de Gijón que nos recibe con lluvia a eso de las 14:30.
Es hora de reponer fuerzas ya que a las 16:00 nos recibe el guía que nos dará una visita turística por la ciudad asturiana de Gaspar Melchor de Jovellanos.
La visita comienza con un repaso a la historia de Gijón (curiosamente contada por un guía de Oviedo) y un recorrido por sus calles camino de un sitio que nunca me imaginé que era como finalmente vi (la Universidad Laboral de Gijón).
Inmenso el patio donde según el guía simula un típico pueblo de España con su ayuntamiento, iglesia, teatro y, como no, el bar. Lo que más me impresionó fue la iglesia con su torre del reloj y la fachada del teatro. Después de darnos las oportunas explicaciones nos fuimos a ver los jardines que tienen bastante similitud con los de la Alhambra de Granada (salvando las distancias).
Aquí podéis consultar su historia: www.universidadlaboraldegijon.es
Tras una parada en el parque de la Providencia para observar el mar y las vistas de la ciudad de Gijón desde su mirador, la siguiente parada la hacemos junto a la estatua de Don Pelayo y el Palacio de Revillagigedo donde nos muestran los restos de la muralla romana de la ciudad. La visita guiada termina en la plaza Mayor junto al ayuntamiento sobre las 19 horas.
De momento el tiempo nos está respetando al máximo y apenas ha llovido en toda la tarde a pesar de los nubarrones que se ciernen sobre nuestras cabezas.
Después de dar unos cuantos paseos por ésta última zona (barrio antiguo), son las 20:15 de la noche y es hora de regresar al hotel puesto que tenemos la cena prevista para las 21 horas y después de las calorías que hemos quemado en ésta jornada es hora de reponer fuerzas y de un merecido descanso, pues la jornada que nos espera mañana es dura y apasionante.
Domingo 7 de diciembre: A las 7 de la mañana suenan los despertadores de las habitaciones del hotel, ya que el desayuno está previsto para las 8 y a las 9 partimos para nuestra segunda jornada de éste puente de la Constitución.
Enseguida retomamos la ruta de la A-8 (Autovía del Cantábrico) hacia la localidad de Unquera famosa por sus corbatas (de comer), donde tomaremos el desvío hacia Potes. Sin embargo hay un cambio de planes debido a que vamos con tiempo suficiente y decidimos hacer una pequeña escala en Llanes.
Llanes es un pueblo marinero de la costa asturiana de aproximadamente 13500 habitantes cuya principal fuente de riqueza es el mar. Nuestra escala aquí es de apenas hora y media (10:30 a 12:00) aunque suficiente para ver lo principal de ésta villa (ayuntamiento, casino, cubos de la memoria y la playa de El Sablón). Personalmente había pasado por Llanes más de una vez pero nunca había tenido la oportunidad de parar y la verdad que me ha parecido un pueblo muy "coqueto" donde me imagino que en verano ha de estar "petao".
Proseguimos nuestro camino rumbo a Potes por la N-621 entre grandes desfiladeros y siempre acompañados por el río Deva. La carretera es estrecha pero nada comparable a la que estrechez de la que tiene la subida al pueblo de Peñalba de Santiago (León) que subimos el pasado mes de mayo.
Como tenemos la intención de subir en el teleférico de Fuente Dé por la tarde y las noticias que nos llegan es de que la "cola" para adquirir los pasajes es de media hora, decidimos adelantar la comida que tenemos prevista en Potes para las 13:30 a fin de llegar sobre las 16 para coger dicho teleférico y que no se nos eche la noche encima.
La llegada a Potes es a las 13:15 por lo que tenemos el tiempo para tomar unas cuantas fotos e irnos a comer para salir sobre las 15:15 camino de Fuente Dé.
La comida en Potes es, para mi sin desmerecer al resto, la mejor que realizamos en éste viaje. Para empezar y como obsequio de bienvenida nos ofrecen un "tostadillo" de Potes. Luego como primer plato no podía faltar un cocido montañés que estaba como se suele decir "de muerte". De segundo plato nos sirvieron una carne asada acompañada del mejor puré de patata que tomé en mi vida (se fundía sólo en la boca de lo rico que estaba). Y para terminar un postre típico de la zona del valle de Liébana.
Son las 16:00 de la tarde cuando llegamos a un sitio, os lo digo de verdad, INCREÍBLE, sobre todo si lo encontráis como lo encontramos nosotros lleno de nieve. Hemos tenido muchísima suerte porque si en vez de venir aquí el día 7 venimos el 6 las probabilidades de subir en el teleférico serían mínimas ya que ha estado nevando y la niebla habría cubierto la montaña y no podríamos haber disfrutado de las mismas vistas.
Todo lo que os cuente aquí sobre Fuente Dé será palabrería por mi parte. Solamente os voy a dejar el vídeo de la subida en el teleférico para que observéis las sensaciones que puede llegar a producir subir a 2100 metros de altitud en 4 minutos. Espero que lo disfrutéis.
Lunes 8 de diciembre: Llegamos ya a nuestro último día de puente, en el que disfrutamos de una mañana de asueto por la ciudad de Gijón ya que por la tarde después de la comida emprenderemos viaje de vuelta a casa.
Después de un buen desayuno decidimos "probar suerte" para visitar el museo del ferrocarril. La diosa fortuna no nos quiso acompañar pues dicho museo cierra los lunes (a pesar de que éste lunes no era un lunes cualquiera).
Tenía las ganas de no marcharme de Gijón sin ver "El Elogio del Horizonte" de Chillida y allá fuimos ¡¡¡Menuda mojadura que pillamos!!! fue el único momento en que nos llovió durante el viaje pero ¡¡¡Como caía!!! pero cumplimos con nuestro propósito.
La mañana poco más dio de sí, más que para tomarnos un café y hacer algunas compras de productos de la tierra. Luego comida (como no podía ser de otra manera no faltaron las "fabes") y viaje de regreso con escala en un pueblo FANTÁSTICO que ya conocía de haber estado dos veces con anterioridad, Cudillero con un mar que metía respeto a pesar de vivir en zona de costa.
Y así transcurrió un fin de semana de puente como diría el otro "de no parar" pero cuando se ésta por ahí se libera bastante la mente de la monotonía y los problemas diarios y se vuelve con las pilas cargadas.
A decir verdad me ha gustado mucho todo lo nuevo que he visto pero sobre todo me quedo con la visita a Fuente Dé y ese regalo que le dí a mis ojos con lo que desde allí arriba he visto.
Un abrazo amig@s.
De momento el tiempo nos está respetando al máximo y apenas ha llovido en toda la tarde a pesar de los nubarrones que se ciernen sobre nuestras cabezas.
Después de dar unos cuantos paseos por ésta última zona (barrio antiguo), son las 20:15 de la noche y es hora de regresar al hotel puesto que tenemos la cena prevista para las 21 horas y después de las calorías que hemos quemado en ésta jornada es hora de reponer fuerzas y de un merecido descanso, pues la jornada que nos espera mañana es dura y apasionante.
Domingo 7 de diciembre: A las 7 de la mañana suenan los despertadores de las habitaciones del hotel, ya que el desayuno está previsto para las 8 y a las 9 partimos para nuestra segunda jornada de éste puente de la Constitución.
Enseguida retomamos la ruta de la A-8 (Autovía del Cantábrico) hacia la localidad de Unquera famosa por sus corbatas (de comer), donde tomaremos el desvío hacia Potes. Sin embargo hay un cambio de planes debido a que vamos con tiempo suficiente y decidimos hacer una pequeña escala en Llanes.
Llanes es un pueblo marinero de la costa asturiana de aproximadamente 13500 habitantes cuya principal fuente de riqueza es el mar. Nuestra escala aquí es de apenas hora y media (10:30 a 12:00) aunque suficiente para ver lo principal de ésta villa (ayuntamiento, casino, cubos de la memoria y la playa de El Sablón). Personalmente había pasado por Llanes más de una vez pero nunca había tenido la oportunidad de parar y la verdad que me ha parecido un pueblo muy "coqueto" donde me imagino que en verano ha de estar "petao".
Como tenemos la intención de subir en el teleférico de Fuente Dé por la tarde y las noticias que nos llegan es de que la "cola" para adquirir los pasajes es de media hora, decidimos adelantar la comida que tenemos prevista en Potes para las 13:30 a fin de llegar sobre las 16 para coger dicho teleférico y que no se nos eche la noche encima.
La llegada a Potes es a las 13:15 por lo que tenemos el tiempo para tomar unas cuantas fotos e irnos a comer para salir sobre las 15:15 camino de Fuente Dé.
La comida en Potes es, para mi sin desmerecer al resto, la mejor que realizamos en éste viaje. Para empezar y como obsequio de bienvenida nos ofrecen un "tostadillo" de Potes. Luego como primer plato no podía faltar un cocido montañés que estaba como se suele decir "de muerte". De segundo plato nos sirvieron una carne asada acompañada del mejor puré de patata que tomé en mi vida (se fundía sólo en la boca de lo rico que estaba). Y para terminar un postre típico de la zona del valle de Liébana.
Son las 16:00 de la tarde cuando llegamos a un sitio, os lo digo de verdad, INCREÍBLE, sobre todo si lo encontráis como lo encontramos nosotros lleno de nieve. Hemos tenido muchísima suerte porque si en vez de venir aquí el día 7 venimos el 6 las probabilidades de subir en el teleférico serían mínimas ya que ha estado nevando y la niebla habría cubierto la montaña y no podríamos haber disfrutado de las mismas vistas.
Todo lo que os cuente aquí sobre Fuente Dé será palabrería por mi parte. Solamente os voy a dejar el vídeo de la subida en el teleférico para que observéis las sensaciones que puede llegar a producir subir a 2100 metros de altitud en 4 minutos. Espero que lo disfrutéis.
Lunes 8 de diciembre: Llegamos ya a nuestro último día de puente, en el que disfrutamos de una mañana de asueto por la ciudad de Gijón ya que por la tarde después de la comida emprenderemos viaje de vuelta a casa.
Tenía las ganas de no marcharme de Gijón sin ver "El Elogio del Horizonte" de Chillida y allá fuimos ¡¡¡Menuda mojadura que pillamos!!! fue el único momento en que nos llovió durante el viaje pero ¡¡¡Como caía!!! pero cumplimos con nuestro propósito.
La mañana poco más dio de sí, más que para tomarnos un café y hacer algunas compras de productos de la tierra. Luego comida (como no podía ser de otra manera no faltaron las "fabes") y viaje de regreso con escala en un pueblo FANTÁSTICO que ya conocía de haber estado dos veces con anterioridad, Cudillero con un mar que metía respeto a pesar de vivir en zona de costa.
A decir verdad me ha gustado mucho todo lo nuevo que he visto pero sobre todo me quedo con la visita a Fuente Dé y ese regalo que le dí a mis ojos con lo que desde allí arriba he visto.
Un abrazo amig@s.
